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Diluye una parte de vinagre con una parte de agua en una botella rociadora. Utiliza la solución para rociar sobre las superficies grasosas, como la estufa y la campana extractora, y luego limpia con un paño suave. El vinagre actúa como un desengrasante natural, ayudando a eliminar la grasa acumulada.
¿Sabías que el ácido acético del vinagre puede cortar incluso la grasa más resistente?
Añade una taza de vinagre al lavavajillas y ejecuta un ciclo de lavado vacío. Esto no solo limpia el lavavajillas sino que también elimina los olores. De manera similar, puedes usar vinagre para limpiar el horno microondas, la cafetera y otros pequeños electrodomésticos.
Unas gotas de vinagre pueden hacer maravillas en tus recetas. Utilízalo para marinar carnes, hacer aderezos para ensaladas y hasta para realzar el sabor de tus sopas y estofados.
Si tu cocina tiene olores persistentes, coloca un pequeño recipiente de vinagre en el mostrador. Este actuará como un neutralizador de olores, ayudando a mantener tu cocina fresca y agradable.
El vinagre también puede actuar como repelente de moscas de la fruta. Un recipiente cubierto con plástico y agujeros pequeños atrapará y eliminará estos molestos insectos.
El vinagre es un ingrediente versátil que va más allá de la despensa. Su capacidad para limpiar, desengrasar y mejorar el sabor de tus comidas lo convierte en un imprescindible en toda cocina. Sigue este manual y descubre cómo el vinagre puede transformar tu cocina de forma ecológica y efectiva.